En la popular comedia indie Pequeña Miss Sunshine (Jonathan Dayton, Valerie Faris, 2006), una de las paradas que la disfuncional familia protagonista hace en su road trip desde “Alburquerque”, según se explica en la ficción, hasta “Redondo Beach, California” es el mítico diner Pann’s, en Inglewood, al sur de Los Angeles.
El Pann’s es un diner clásico y una de las muestras mejor conservadas de la típica arquitectura googie que floreció en los cincuenta y sesenta en California, de inspiración futurista y formas geométricas. Su tejado puntiagudo, su jardín tropical exterior, sus grandes cristaleras y su característica señal de neón hacen del Pann’s un lugar de peregrinación para todo aquel interesado en la arquitectura y el diseño de la Era Espacial.
En una de la típicas cabinas de cuero rojo del interior es donde la peculiar familia de la película toma el desayuno y donde el padre presiona a la pequeña Olive para que no coma helado y mantenga la línea. Los demás le demostrarán enseguida lo equivocado que está, animando a la niña a comer lo que le apetezca.