Nunca hubo un momento en que las mujeres no fueran una fuerza impulsora en el rock ‘n’ roll, pero las décadas de 1980 y 1990 fueron testigos del surgimiento de una cosecha de talentos femeninos del rock que serían la envidia de cualquier década.
Entre las icónicas estrellas del rock que dejaron su huella en la época, muchas de las cuales fueron producidas de forma independiente, se encontraban Pat Benatar, Joan Jett, Fiona Apple, Gwen Stefani, Sheryl Crow, Alanis Morrisette, Liz Phair, Jewel, Annie Lennox, Cyndi Lauper, Bjork, Dolores O’Riordan de The Cranberries, Tori Amos, Sarah McLachlan y Alicia Keys.
Quizá el sonido de Pat Benatar sea el que más rápidamente nos lleve a la música de los 80. Love is a Battlefield es todo un referente de aquella época.
Patricia Mae Andrzejewski nació en una familia de origen polaco e irlandés en Brooklyn, y creció en Lindehurst, Nueva York, inicialmente estudió ópera como su madre. A los 20 años se mudó a Richmond (Virginia), donde trabajaba como cajera en un banco y por las noches cantaba. Ella y su esposo se mudaron a Nueva York en 1975 donde, poco tiempo después, se divorciaron.
Pat Benatar empezó a desarrollar su carrera como cantante y, en 1977, fue descubierta en un concurso amateur de un club de comedia en Nueva York. Debido a esa actuación fue contratada por Chrysalis Records por su fundador Terry Ellis.
Posteriormente se casó con el guitarrista de la banda Neil Giraldo. Pat Benatar es conocida por su actitud dura, habiendo grabado un número significativo de canciones con metáforas de batallas, como Invincible, Hit me with your Best Shot, Sex as a Weapon, Fight it Out o la mencionada Love is a Battlefield.
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