Desde la autopista I-10, que lleva de Los Angeles a Palm Springs, son bien visibles los monstruos prehistóricos que se han convertido en la atracción principal de Cabazon.
Los Cabazon Dinosaurs son dos enormes dinosaurios, un Brontosaurio y un Tyrannosaurus Rex, que el propietario del diner Wheel Inn construyó como reclamo para visitantes a principios de los 70. El Wheel Inn está cerrado en la actualidad, pero las populares esculturas en forma de dinosaurio siguen en pie. El diner, así como los monstruos que le rodean, han aparecido en numerosas películas: Paris, Texas es una de ellas, así como la exitosa —al menos en EEUU— La gran aventura de Pee-Wee, una road movie excéntrica dirigida por Tim Burton.
El Tyrannosaurus Rex de tres pisos de altura forma parte de un modesto parque de atracciones que es ideal para visitar con niños. Para aquellos que no tengan tanto tiempo, es recomendable entrar al menos en el Brontosaurio a través de la escalera que sube por la cola. Dentro hay una tienda de souvenirs y un museo de tendencias creacionistas que niegan la evolución y que defienden, con coloridos eslóganes, que Dios creó a la vez a los dinosaurios y a los hombres.
Los dinosaurios y el Wheel Inn aparecen en el vídeo musical de Everybody Wants To Rule The World (1985) del grupo pop inglés Tears for Fears.
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