Las localizaciones más importantes de Malas tierras (Terrence Malick, 1972) están diseminadas a lo largo de un radio de no más de 160 kilómetros, en un área que engloba partes de cuatro condados de Colorado. En el trayecto entre las ciudades de Pueblo y de Las Animas se encuentran localidades como Rocky Ford, en cuya calle principal aún está en pie el edificio escogido por Malick para situar la escuela de música desde la que Sissy Spacek miraba por la ventana antes de iniciar su salvaje huida.
A las afueras de este adormecido pueblo, conocido por su producción de sandías y melones, se encuentra el árbol situado al borde del río Arkansas bajo el que Holly pierde la virginidad con Kit, en una de las escenas más memorables e incómodas. El árbol se ve con claridad desde la carretera, pero está dentro de una propiedad privada, cercado por una valla. La Junta es la capital del condado de Otero y su aeropuerto municipal es el aeródromo que aparece en la última secuencia de la película. Para acabar, en la estrecha y solitaria carretera que une La Junta con Trinidad se pueden encontrar las ruinas fantasmagóricas de la gasolinera en la que, casi al final, Kit es identificado por unos policías, iniciando una enloquecida carrera que acabara con su detención.