La plaza de Santa Fe, en New Mexico, con sus edificios redondeados de estilo pueblo y sus arcos laterales bajo los que se sitúan puestos callejeros de artesanía indígena, sigue prácticamente como aparece en la película Carretera asfaltada en dos direcciones (Monte Hellman, 1971), aunque los hippies y jóvenes de pelo largo han sido ahora sustituidos por grupos de turistas.
En la película, titulada originalmente Two-Lane Blacktop, dos chicos —James Taylor y Warren Oates— recorren las carreteras de Estados Unidos en un polvoriento Chevrolet del 55 y compiten en carreras ilegales. Eso es lo único que les importa, ni hablan ni se divierten. Un día se cruza en su camino GTO, un peculiar conductor que los desafía… La película fue un fracaso comercial, pero se convirtió en película de culto como otras road-movies de la época como Easy Ryder (Dennis Hopper, 1969).
El aparcamiento en el que los protagonistas de Two-Lane Blacktop eligen a su próximo competidor es el del restaurante Bert’s Burger Bowl, que cerró sus puertas en 2015 después de 61 años en activo. El bar de paredes rojas y aspecto decadente —que parece sacado de una película de David Lynch— en el que El Conductor bebe algo mientras La Chica y El Mecánico pasan la noche juntos es The Palace Restaurant and Saloon, un restaurante que después de la hora de la cena se convierte en un recomendable lugar para tomar una copa alejados del ambiente más turistico de hoteles y restaurantes elegantes. Finalmente, el motel que comparten los tres es el Cottonwood Court, aún en funcionamiento aunque algo destartalado.
© 2020 Street Bar · Legal · Privacidad · Cookies